Calculan un aumento de casi 13%. También podría quebrarse esa barrera psicológica
Imparable: el mercado pronostica que la onza de oro trepará a u$s2.000 en 2013

Sofía Bustamante
La crisis que empezó a mediados de 2007 dejó patas arriba al sistema financiero. Y si bien la incertidumbre hizo que los activos se derrumben, el oro recorrió el camino opuesto. Así, el instrumento utilizado como refugio por los inversores tuvo un rally alcista que lo ubicó en un máximo histórico de u$s1.921,15 la onza, marca que logró en septiembre del año pasado.
Básicamente, debido a que las dudas en torno de las principales economías del mundo persisten, los pronósticos de los expertos señalan que durante 2013 la tendencia al alza se mantendrá firme. Incluso vaticinan el quiebre psicológico de los u$s2.000 la onza. Más allá de guiarse por lo que pudiera significar la continuidad de la crisis, son la demanda de los inversores -especialmente de los bancos centrales- y la posibilidad de que las políticas expansivas provoquen inflación las razones por las que el metal precioso subiría.

Según Research for Traders, las proyecciones del mercado anticipan un avance para cada trimestre de 2013, para finalizar en u$s1.925.
Más precisamente, el banco Barclays vaticina un valor de 1.900 para fin del año que viene, mientras que el Credit Suisse lo ve a u$s1.850 la onza.
En cambio, empresas vinculadas al metal hablan incluso de que se atraviese la barrera psicológica de los u$s2.000. A&A Commodities, entidad española recientemente asociada al gigante Industrial and Commercial Bank of China (ICBC), sostiene que antes de mitad de 2013, el oro alcanzará el nuevo récord.
No obstante, aun cuando tan sólo se confirmara la estimación más conservadora, la de Credit Suisse, el incremento sería de 8,5%, una ganancia nada despreciable en momentos en los que las tasas de interés están en niveles bajísimos.

“Los bancos centrales, tanto de Europa como de China, están comprometiéndose con mayores medidas para impulsar el crecimiento económico mundial, lo que hace crecer la preocupación ante más inflación y devaluación de la moneda”, explicaron desde Research for traders.
Por su parte, el presidente de una consultora -que pidió no ser citado- señaló que mientras persistan los temores sobre el futuro de las principales economías del mundo, el oro va a seguir siendo demandado, lo que hará que el precio se eleve en el largo plazo.
En el caso de los Estados Unidos, si bien es probable que las diferencias entre la administración de Barack Obama y los legisladores se disuelvan, la Oficina de Presupuesto del Congreso advitió que el país corre el riesgo de una recesión si los recortes de gastos y aumentos de impuestos no se resuelven. En cuanto a Europa, no sólo Grecia puede dejar en jaque la continuidad de la zona euro. También es España, que representa incluso mayor peso en el bloque, la que inquieta al mercado.

Por su parte, el analista de Research de Puente Gastón Sempere resaltó que en momentos en los que las inversiones pierden calificación, “el oro no tiene riesgo de contraparte. Por esto es que los bancos centrales eligen cada vez más al oro como refugio”.
Existen distintas formas de accceder al oro. Desde monedas hasta un ETF. Sin embargo, en mercados como los de España, en donde se desconfía del sistema financiero, se está incrementando la compra de lingotes. En época de crisis, el oro físico da sensación de mayor seguridad.
Cuatro opciones para invertir en el metal precioso
Si bien existen varias alternativas a la hora de invertir en oro, las más habituales son cuatro: las monedas, los lingotes, los ETFs y los futuros.
Tal como detallan en Puente, existe una gran variedad de monedas de oro acuñadas en distintos países y es importante conocer las especificaciones de las mismas y tener en cuenta que su valor.
Agunas de ellas son el Krugerrand de Sudáfrica, el Águila de oro de Estados Unidos y el Argentino oro, nombre por el cual no hace falta especificar su origen.
En tanto, los lingotes pueden ser de una onza, o de entre 10 y 1000 gramos.
No obstante, como en Argentina el cepo cambiario limita la compra de oro físico, son los ETFs y los futuros los elegidos.
Mientras que el ETF es un instrumento que replica el precio del oro, los futuros permiten acordar una compra o venta para un momento determinado.