INNOVACIÓN

En junio se prevé el montaje de la planta industrial. Forma parte de un proyecto de científicos argentinos que busca la industrialización del litio en baterías.

Ángeles Irusta

Si todo marcha según lo previsto, en dos meses comenzará el montaje de una planta industrial para la producción de baterías de litio en Catamarca. Con una inversión cercana a los 30 millones de dólares, la línea de producción podrá instalarse en el parque industrial El Pantanillo o en la zona de Recreo, según los requisitos que se acuerden con el gobierno catamarqueño, ya en conversaciones avanzadas. Así lo confirmó a CUYO MINERO Daniel Barraco, físico investigador del CONICET y ex decano de la facultad de Matemática, Astronomía y Física (Famaf) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), quien coordina un grupo de científicos provenientes de distintas unidades académicas y de investigación – las universidades nacionales de Córdoba y La Plata, CONICET, CONEA y CONAE-, que impulsan un proyecto para la industrialización del litio argentino, con acento en la fabricación de baterías para productos electrónicos.

De acuerdo a Barraco, la primera tanda de baterías a producir estará destinada a los equipos del Plan Conectar Igualdad, el programa nacional a través del cual se distribuyen netbooks a los estudiantes secundarios. “Contamos con el respaldo del Gobierno nacional a través del Ministerio de Ciencia y Tecnología y del Ministerio de Industria, se estima que se necesitarán más o menos 400 mil unidades para el plan Conectar, son las primeras precisiones; lo importante es que tenemos condiciones para integrar todo (hacer la celda e integrarla a una batería) y sumar insumos nacionales a estas computadoras” precisó el académico.

De esta forma, la planta a instalarse en suelo catamarqueño será la primera de las tres previstas a construirse en provincias con reservas de litio, como Jujuy y Salta. Es que la demanda no sólo está dada por las baterías para computadoras, la industria electrónica acercó al grupo su interés en la producción de baterías para celulares y también hay interesados en el desarrollo de fuentes de energía para la industria automotriz. “La intención es que tanto la fabricación de celdas como el ensamble de las baterías se realicen en plantas emplazadas en las provincias productoras de litio, es decir, concretar una industrialización en origen. La ambición es para que en un futuro no muy lejano, el litio que salga del país lo haga en forma de batería y con un proceso completo ciento por ciento nacional”, expresó Barraco.

Los inicios del proyecto remontan a 2011 y el paso inicial fue la fabricación de los óxidos, el cátodo, ánodo, electrolito y obtener los plásticos que integran la batería; el segundo fue avanzar en la purificación de los elementos y el tercero, la instancia actual, la próxima instalación de la planta catamarqueña. Según la planificación de los investigadores, se espera que el montaje de la planta esté culminado a fines de este año; con estas bases, el anhelo es que hacia 2014, todos los componentes integrantes de las baterías (comenzando con las celdas), puedan ser fabricados en el país.

Catamarca está a un paso de fabricar baterías de litio

Perspectivas

Según Barraco, el proceso de purificación del litio “es caro”, pero hacerlo le aportaría al país un importante rédito económico: mientras que la materia prima (salmuera de litio y agua) cuesta unos 300 dólares la tonelada, el carbonato de litio llevado a una pureza del 99% sale 6 mil dólares la tonelada; es decir, 20 veces más. “Y si pudiéramos producir litio metálico, sale 6 mil dólares el kilogramo”, precisó Barraco, aunque explicó que hacer baterías con este elemento es aún muy complicado. Las cifras no son un dato menor si se considera que, según la revista Forbes, Argentina, junto a Chile y Bolivia, concentran el 85% de las reservas mundiales de este mineral.

Por otro lado, Salta ya dio sus pasos en lo que a fabricación de baterías de litio se refiere. Tal como publicara este suplemento a principios de año, esta provincia fabrica baterías de litio de uso aeronáutico desde hace un año. Se trata de los GPU (ground power unit sus siglas en inglés), un arrancador portátil de aviones y helicópteros, producidos por la empresa Enerlitio.

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